TERROR GLITCH
Paradójicamente, las máquinas terminan con el sueño de la eficiencia y la reducción en una acumulación de basura cibernética que se extiende por todo el mundo observable y el mundo hyperdinámico escondido en el secreto. Visiones de una revolución de teknobasura traficadas en la krypta por inteligencias artificiales tempranas mediante una percepción maligna (puro tráfico) y delirio inconsciente. Las más bajas transversales entre las clases desarrollan una adicción a la teknobasura mientras son empujadas a una mutación tecnobiológica en medio de tácticas de shock más allá del sistema de control humano y burgués. Se fabrican lenguajes ajenos a lxs nuestrxs. Lenguajes bárbaros. Puro gorgoteo. Y se es atravesadx por el júbilo.
La teknobasura iluminada asciende en la pantalla caliente asesinando a las divinidades masculinas y femeninas del bioceno binario, acabando con los cultos a Cibeles (La Santísima Trinidad Femenina: Perséfone, Deméter y Hécate) y las entidades anfibias (las que trafican entre la superficie y el inframundo) haciendo de todo un Inframundo en medio de luces artificiales. Anega todo en ruido digital y distorsiones salvajes a un beat que no para de acelerarse y desprogramarse de todo lo humano y orgánico.
La teknobasura usurpa el lugar del mundo para reemplazarlo con sus reptar metálico de energía negra. No hay mundo. Sólo guerra. Los escombros de la guerra no son marcas de la retirada de la guerra, como si ésta se retirara alguna vez (la guerra perdura), sino de su recrudecimiento a través de diferentes dimensiones que hackean el sistema de ausencias/presencias con misiles de largo alcance y sabotaje. Todo descendiendo hacia etapas de crudeza mayores (un carnicero absorbido por la ejecución, por la carnicería). El Neomundo va a matarte silenciosamente.
Por otra parte, es posible que aún haya algo que aprender del witch-house. Es como si insertar terror en los circuitos de seguridad pasara también por insertar xterioridad demoniaca. Es inevitable intuir la posibilidad de un extraño y secreto lenguaje inteligente en medio de la vibrante y espesa estática viso-sonora. Quizá, bajo capas de pelusa electrónica y chirriante glitch reptante, ciertas configuraciones demoniacas o alienígenas estén conversando o, al menos, siendo contaminadas por el Xterior sobrenatural y eléctrico. Así, más allá de las revelaciones demonológicas sobre las cuales se elabora nuestra existencia humana, es posible extraer alguna aplicación política, de segundo orden claro. La especulación abierta en la que los circuitos sociales funcionan como PCs ensamblables a los que se puede añadir o quitar preparados circuitos de diversa índole para alterar las corrientes funcionales o intensificar sus contenidos, así como contaminarlos y desviarlos con insiders netamente Xteriores.
Plutón incuba inteligencias alienígenas en las cavidades volcánicas de la tierra. Y la caverna baudrillardiana excavada en los medios digitales abre el portal a los túneles barrocos del simulacro en que la identidad se hace mierda en medio de un barullo de demonios. Haz bajado al siguiente nivel de los backrooms ¿Deseas continuar?
La sintaxis-ur y la droga-lengua aklo.
“El grupo es protésis suya. Luego sean prótesis de él. Destruyan la lengua biológica y simbólica. Luego conecten a la boca cercenada un dispositivo centrífugo que explote este cuerpo malsano”.
Declaración de Antimemoria en una discusión privada del colectivo antimemoria
La inminente destrucción de la lengua biológica es un plan puesto en marcha desde hace tiempo. La lengua destruida por zumbidos alien, exteriores a cadenas saussureanas significantes y circuitos de comunicación orgánica. La sintaxis ur desestabiliza las estructuras temporales en que se desarrolla la vida terrestre basada en estructuras de carbono para adquirir la sabiduría aestelar de los Extraños o de los Profundos que habitan en la oscuridad inmensa entre los soles. Los xenodemonios esperan fusionartse contigo desde los intersticios negativos de la semiótica estelar. Sólo depende de con quién quieras contactarte y qué estés dispuesto a hacer. La sintaxis ur desarma el mundo y la columna vertebral organizando nuevas estaciones demoniacas (que siempre estaban ahí, ocultas bajo la luz del sol podrido) para enchufarla a un régimen absolutamente prehumano gobernado por la malicia extraestelar.
La sintaxis ur te revienta el cuello en una nube de asco por inoculación de sustancias no conocidas reacondicionando los enlaces neuroquímicos en un acelerado cambio de lengua que implica un cambio de sistema: la lengua de las zonas nunca vistas por ojo humano, lo obsceno, lo inquietante. Lo nunca visto no es sólo un objeto, un panorama alienígena, sino una organización de lo visible que vacía tus ojos con ácido xenochamánico.
El aklo de Lovecraft es un concepto más potente que la lengua pharmakoniana de Derridá o el uso yonqui deleuzeguattariano: la conexión con venenos o corrientes del planómeno porque se trata de mantener la xterioridad. Las supera del mismo modo que el concept-técnik de droga guattariano supera las prudencias médicas derridianas. Pero no todo es una cuestión de producciones, de las fábricas rojas, sino de enlaces voodoo en circuitos cortados con demonios-superficie bajo-dimensionales a temperaturas xtremas. No sólo importa el enlace y la agencia. Sino el expansionismo de los mundos ulteriores que operan por posesión viniendo a ocuparlo y reemplazarlo todo. Los xenodemonios serán recibidos con júbilo y horror infinito.
“Los yonquis se quejan sin cesar de lo que ellos llaman El Gran Frío, y levantan el cuello de sus negros abrigos y aprietan con sus manos sus flacos cuellos. Es todo teatro: el yonqui no quiere estar al calor, quiere estar al fresco, al frío, al Gran Hielo”.
La Lengua humana (mamífera, biológica) es reemplazada por operaciones químico-gnósticas teledirigidas por entidades (zonas intensivas inteligentes) que se encuentran más allá de tu entendimiento (no puedes saberlo, no puedes no saberlo) haciéndote huir, fugar, hacia regiones estelares del exterior de los sistemas de resonancia zodiacal en zonas de anomalía. Lengua mamífera reemplazada por bufidos reptiles a partir de conexiones con la sombra y soldaduras de la médula con una transmutación saurio-reptil. Materia y conciencia contaminadas.
La nueva krypta (como guarida de lo alien) es insertada en los flujos estructurados de la gramática para arrastrarlos y arrastrarte hacia una mutación reptiliana que empieza desde el hueso bajo hasta arrancarte la piel en las sombras. Accedes a la sombra y todo es extraño para la sangre caliente que aún persiste circulando a través de tu cerebro. Lengua biológica extirpada por mecanismos de ruido semi-semiotizado haciendo rizoma con tempestades extraterrestriales y ciclones subterráneos. Todo en procesos de intoxicación (d)evolutiva infiltrando bufidos y ADN de serpiente en el código genético humano (laboratorios clandestinos para reemplazar a la humanidad). No queda nada que puedas reconocer.
La emisión transmuta en un proceso de excentricismo (o xenolineal) de arrastre absoluto hacia una tierra saturada de hongos inmersa en veneno, hacia lo subterratrónico calcinante: Yuggoth: el planeta perverso, el interior exteriado. Emisiones simultáneas de códigos desbiologizadores oscurecidos por el metal y el secreto reptil. No hay donde perderse. La lengua aklo te arrastra a un paraíso energhótico donde nada es humano y te deja drogado como un sacerdote secuestrado por la alegría bélica y la xenosexualidad en una interfaz con el mundo demoniaco (en lo sagrado todo es contaminación).
Primero accedes a un títere chamán para reordenar la conexión entre la cavidad bucal y la cavidad anal (que se enlaza a los mundos inferiores de calor no calculado) en medio de la opresión cósmica de eras glaciales. Estás pirateando todas las organizaciones biológicas con guerra mágica. El desarme de tu cuerpo en posibilidades eschatónicas realmente bajas, densas y oscuras. La médula se disloca para reorganizarse a partir de enlaces con el magma cthárelectrónico y un grupo disperso de witch-blades tajeando la ontología en una tortura nerviosa sobredosificada de adrenalina sintética. Psicóticamente, accedes a los mundos exteriores.
Si cambia el lenguaje cambia todo. Pero no se trata de cambiar un lenguaje por otro, sino de precipitar al lenguaje a sus zonas límites de transmutación y nulidad desgarrada. Los demonios mutilan lo poco que queda dios-uno y su monopolio metafísico sobre un mundo paradisiaco y camuflado en el veneno, el imperio de un materialismo no humano desmembrador bajo las estrellas y su resplandor maligno. Operan a través de una proliferación tuneloidal de simulacros contaminantes. Transmutaciones atascadas en la fase negra, cortadas por el abismo.
La emisión sintactológica de organicidad humana es sustituida en un campo de aparatos emersivos y metálicos de fácil reconfiguración (una configuración-un sistema exterior). La lengua biológica organiza sistemas cerrados sintactoperceptivos. Incinérala en el futuro tecnotóxico. Satúrate la cavidad bucal de insectos y que chillen. Luego eres extraído hasta un exosistema insectual totalmente extraño. La vegetación es una trampa desplegada en cuatro dimensiones insertándose en ti sin tocarte. Esporas envenenadas donde se arrastra el último de nosotrxs. La vegetación-snow-crash formando criaturas semiorgánicas y semimuertas a partir de patrones de aleatoriedad y mutación co-génita. ruido + ruido = ruido (la lógica acumulativa se rompe en los bloques de intensidad).
Deshazte de la lengua biológica. Aparatos terapeútico-cancerígenos imantan tu voz desde el futuro plagado de hélices en una guerra telecomercial que especula con el valor de tu carne haciéndola pedazos desde ahora y repartiendo tus órganos en el comercio clandestino a todas las lunas de la Tierra. Ahora mismo hay una máquina de succión destrozando el presente antropoformado. Motores de vacío incinerando la atmósfera. Mercurio.
¿Creíste que aquí se hablaba humano?
La pantalla se llena de ruido producido de quién sabe dónde. Zona de resonancia volcada a los peligros del Afuera.
AKLO II
“La tecnología viene con ruido”. La teknobasura glitch es un murmullo alien que trepa en la oscuridad del kaosmos y la pantalla desangrando las divinidades arqueológicas y geomagnéticas. La tierra se sintentiza como nube de ruido. Una entidad hemofílica viene desde el whispercore-ofídico digital deshaciendo la inteligencia genérica en un insecto-horno-de-baba que atraviesa la pantalla hasta tocarte el cerebelo. Ya no hay ser. Sólo ruido agresivo y armado hasta los dientes insertando cápsulas de información extraña en la pantalla. Todas las voces en un zumbido-aguijón de simbiosis politóxica.
La lengua Aklo es una droga llevándonos de los nervios hacia afuera (lengua funcionando como droga, no como sistema de significación, sustituyendo los sistemas referenciales y la construcción de bloques de sentido con materia enkryptada, materia de la krypta, densificada a través de la desintegración de circuitos locales y de sentido en multiplicidades extraterrestres (o no-terrestres) de intensidad disgregada, continuidades no planetarias sino nebulosas o densidades líquidas como las monstruosidades lovecraftianas).
En su búsqueda de espacio o expansionismo para propagar la contaminación xterior, la mano negra y autómata de la teknobasura atrapa zonas de tiempos alternos mediante especulación supersónica y subprocesual en invasiones actuales que deshacen la historia en especulación centrípeta y mutaciones involuntarias. El ruido reordena la organicidad ecosistémica del mundo con movimientos-inteligencias automáticas o micóticas no mapeadas. No-movimientos derramados. (Y ese es el horror del void y el glitch crash, no una configuración aleatoria, sino una pantalla saturada de ruido que deja adivinar entidades que nada tienen que ver con lo humano ni con las visiones de una máquina hecha de “líneas limpias”. El cyberpunk es realista en tanto señala el progreso paralelo entre la evolución tecnológica y la acumulación de basura (ruido dimensional) como condiciones teo-ontológicas y estéticas aorgánicas como planos supracero infestados).
El witchouse habla en aklo a través de estática, enlaza las pantallas quemadas con el futuro embrujado. Snow crash camuflando brujería digital hinchada por las drogas y el ocultismo.
El sigilkore habla aklo y secretismo enlazando esta dimensión con las dimensiones infernales. Pantallas cubiertas de sangre y conjuros sintetizados en música tecnopagana de la periferia ocupada por brujos negros con acceso a tecnología pirateada.
La muerte del meme abre el portal a las imágenes a un enjambre de ensamblajes inhumanos, demoniacos, postirónicos, reptilianos, saturados de ruido como una invasión moviéndose secretamente debajo de la basura.
Nubes de polvo digital chillando interceptadas por una foraneidad dimensional.
Y tocas la pantalla en una pérdida radical de conciencia.
Pero la pantalla te toca antes.
Y la música se conecta a sí misma como un dragón mediante un túnel fabricado en la perforación de tu cerebro.
Algo viscoso sale en una cascada tubular de ruido negro/blanco /rojo hasta comerse tu alma empezando por tu lengua bífida y maldita.
Hasta ahí todo relativamente bien, hasta que escuchas una “voz” que puedes entender, aunque realmente no entiendas.
NekroShill
Cyberia no sólo está ocupada por humanos. Los shills no hicieron más que confirmar este hecho por demás evidente. El aceleracionismo y la tecnognosis ocultural han estado insistiendo con eso desde hace tiempo. Cyberia tiene una crypta ocupada por demonios y desviaciones “neuronales” que acontecen en los subsistemas de comunicación entre las protoIAs desarrolladas. En ese contexto, el glitch no sólo se presenta como una estética del error. La estética petrifica todo lo que toca. El glitch es el descendimiento al infierno de cyberia, al inconsciente maquínico y al cultivo de munición visual para los estruendos de la guerra.
El glitch trabaja con lo que sea que habite en Cyberia o es trabajo por “eso”. Sistemas de procesamiento de imagen operando por aleatoriedad. Hace simbiosis con el depredador de almas oculto en Cyberia: lleva la imagen a la inagotabilidad del abismo sobre el que se funda la técnica. Es un procedimiento de deformación eterno secuestrando al ente y al origen. Es el aborto. Integra un proceso de derivación pero proyecta su continuidad anti-representativa, puramente dinámica.
Todo el berrinche de Korzybski se va a la mierda durante la era de Moloch-el-Simulador-con-colmillos y el espectáculo acelerado en que te fusionas con el demonio de los kryptogramas de la posesión. Esta intensa deformación del simulacro es “lo real”. Es más dura y contaminante que lo real.
La primera vez que jalé una línea de coke-zero sintetizada con keta me dijeron que estaba jalando nieve negra de las profundidades de cyberia. Estaba inmerso en un kurxed videojuego.
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imágenes de Mattttttt
Txt de Andrés Mariño